domingo, 5 de octubre de 2008

SOBRE EL VIGO ROMANO Y SU PROBLEMÁTICA ( VIII)

4.- CONCLUSIONES:

Antes de empezar a hablar del Vicus Heleni, deberíamos aclarar el término "Vicus", siguiendo a Rodríguez Colmenero "vicus no equivale estrictamente a aldea. Vendría a ser como la capital o vértice de las unidades territoriales en que se dividirá la civitas, ó pagus.

Habitualmente algunos autores identificaban a la ciudad de Vigo cómo el "Vicus Spacorum" de los textos clásicos, Antonio de la Peña, en un reciente artículo sobre las vías romanas de la provincia de Pontevedra, llega a la conclusión de que es errónea está ubicación y que tal villa habría que situarla en tierras coruñesas y más concretamente en Rois ya que el itinerario está equivocado y donde dice Vico Spacorum debería decir Vicos Caporum es decir el pueblo de los Caporos que estaría situado entre el río Sar y Caldas de Reis, estos datos se obtienen por medio del estudio minucioso que se realiza de la vía XXII "per loca marítima" a su paso por la provincia de Pontevedra, al hacer el cálculo de las distancias, basadas estas en el miliario aparecido en la ciudad de Pontevedra.

Pretendemos con este trabajo demostrar la existencia de un vicus, pero no el Spacorum, sino el Heleni, es decir el vicus de los Helenos, que según Strabón sería el pueblo que habitaba el área que nos ocupa No proponemos un modeló de romanización que sea válido para toda Galicia, nada más lejos dé nuestra intención, creemos que es posible que en Vigo, la romanización sí que pudó haberse llevado a cabo en la forma que planteamos, al menos a la vista de los resultados que nos arroja el registró arqueológico de las excavaciones que de un tiempo a esta parte se han multiplicado a lo largo del entorno urbano de la ciudad de Vigo. El punto de partida de este viaje, lo constituye la población indígena existente en el Valle del Fragoso previa a la llegada de los romanos, en concreto estaríamos hablando de un total de 27 castros, llegado el siglo I d. C, la mayoría de estos castros sé deshabita, y sus gentes se distribuyen en 8 castros que son los que indicamos en el apéndice los cuales sé aglutinan alrededor de su capital administrativa, del "Vicus Heleni", dentro del cual estaría englobado el castro de Vigo, pero sólo hasta el siglo II-III, después de Cristo, con posterioridad a estas fechas el yacimiento sé abandona, pasando sus gentes a vivir en la parte baja del poblado y la zona portuaria romana, donde hay una mayor actividad. No sabemos que es exactamente lo qué empuja a las gentes de los castros de los heleni a abandonar sus asentamientos y establecerse en el vicus. Desde luego no fueron obligados a marcharse, esto constituye una constante en la arqueología de todo el noroeste peninsular. Paralelamente a este aumento de la densidad de población en los castros (justificable por la extensión del terreno que van a pasar a ocupar a partir de este siglo) en la zona de lo que es ahora el Arenal, se establece un pequeño embarcadero, a través del cual llegan productos inexistentes en la zona cuyos principales consumidores van a ser los habitantes del Castro de Vigo en primer término y de aquí se distribuirían los productos hacia él interior. A medida que va pasando el tiempo, van llegando comerciantes de otros puntos de la península (como lo demuestran las estelas de los clunienses), los cuales se van a establecer en tomo al pequeño embarcadero. Este pequeño embarcadero estaría situado en la zona de Roupeiro / Hospital, tal y como lo han demostrado recientes excavaciones en varios puntos de la zona, poniendo al descubierto restos de construcciones, así cómo evidencias de actividades más o menos industriales relacionadas con salinas, que pueden hacer referencia a algún tipo de industria que no se ha podido identificar hasta el momento. La importancia de este embarcadero radica en que es el primero en muchos Kilómetros de navegación desdé el Sur, ya que la costa portuguesa del Tajo hacia arriba no ofrece puertos demasiado seguros, así la ría de Vigo sería un punto obligatorio de recalada, viniendo esté hecho a contribuir a la explicación del modeló poblacional que en Vigo se gesta durante el cambio de Era.

En otros puntos de Galicia por esta época (siglo I-II d. C.) se inicia la construcción de factorías y vilae, cosa que no ocurre en nuestro litoral (al menos según lo indican los datos que poseemos en la actualidad), con lo cual tendríamos del siglo I al III después de Jesucristo el Vicus Heleni, constituido en tomo a un enclavé comercial, este núcleo del Vicus Heleni estaría en el castró de Vigo, paralelamente existe un pequeño embarcadero el cual se encarga de aprovisionar a los habitantes del Castro, en la zona portuaria habría algún establecimiento comercial y pueda que algún almacén, pero no formaría parte del Vicus de momento, eso sí actuaría cómo puerto comercial del Castro de Vigo, es significativo en este sentido qué desde las faldas del castro hasta el Roupeiro, no se hallan detectado materiales de está cronología. Volviendo al embarcadero, las escasas gentes que allí habitarían (posiblemente emigrantes), se enterran al lado del puerto, quedando esta zona como futuro límite del vicus dé los siglos venideros, ya qué las necrópolis habitualmente deberían quedar extramuros.

Poco a poco los castros van siendo abandonados, sin duda atraídos por la creciente prosperidad de este vicus, y sus habitantes sé van estableciendo en la zona cercana al mar; a la vez, aquellos comerciantes venidos a Vigo desde otros puntos de la península, ven prosperar sus negocios y empiezan a edificar vilae en las afueras de la ciudad, con un doble objetivo: por una parte tener un sitio de residencia alejado del cada vez más poblado vicus, y por otra iniciar la producción de productos salazoneros con los que suplir las cada vez más escasas importaciones dé otros puntos de la península, motivada está escasez por la creciente inseguridad en los transportes a larga distancia.

Es ahora cuando el Vicus Heleni adquiere su mayor preponderancia, ya que recibe a la población que habitaba ios castros romanizados que rodeaban a la incipiente ciudad, dejando por tanto éstos dé estar habitados, al menos tal y Cómo lo estaban haciendo hasta entonces, es posible que existiese en el castro de Vigo alguna que otra casa aislada, pero el mayor porcentaje de población vendría a ocupar lo que denominamos él Vicus Heleni del siglo III-V. De este modo las extensiones hablan por sí solas, el núcleo del Vicus Heleni estaría formado por unas 51 Hectáreas, mientras que las villas sumarían 8 hectáreas.

SUPERFICIES DE CASTROS, VILLAS Y VICUS HELENI EN HECTÁREAS

CASTROS ROMANIZADOS

Hectáreas

Plaza dos Mouros

1,76

Monte Alba

1,40

Castro de Vigo s. MI

17,09

Castro de Casas s. I-II

2,56

Monte do Sino s. I-II

3,58

Monte da Guía s. I.II

6,43

0 Penedo s. I-II

2,92

As Cruces ? s. I-II

1,20

Superficie total

36,94

VILLAS ROMANAS


Punta Borraileiro s. III-V

1,31

Toralla s. III-V

1,79

Sobreira ? s. III-V

1,30

Fiunchal III-V

2,01

Ríos ? s. III-V

2,10

Superficie total

8,51

VICUS HELENI


Vicus Heleni s. I-II d. C.

132,89

Vicus Heleni s. III-V d. C.

51,11

Aparentemente disminuye el espacio habitable, pero debernos de tener en Cuenta que el patrón poblacional romano significa una mayor densidad de población que un Castró. Por otra parte nos estamos refiriendo al posible área amurallada sin tener en cuenta una mayor extensión qué vendría dada por numerosos hallazgos aislados que jalonan el Valle del Fragoso. El vicus vendría delimitado por las necrópolis dé la c/ Hospital 5, al Este y la de Picacho al Oeste, por el Norte estaría el mar y al sur el límite vendría impuesto por los descubrimientos de la calle Penzol / Joaquín Yáñez.

Resumiendo, hay dos momentos bien diferenciados dentro del Vigo romano, uno en el siglo I-II d.C. caracterizado por castros romanizados del Val do Fragoso y por el Vicus Heleni cuyo centro sería el castró de Vigo, además de la presencia del pequeño embarcadero y alguna que otra factoría e instalación comercial; el otro del siglo III al V, cuando los habitantes de los castros abandonan las alturas y se van a establecer en la zona cercana al pequeño puerto atraídos por las posibilidades que ofrece un cada vez más floreciente enclave comercial, paralelamente los más potentados se establecen en villas-factorías en las afueras del Vicus.

Nota.- Detalle de los diferentes restos arqueológicos localizados en la zona de Ríos (Teis) que se pueden ver en del museo municipal "Quiñones de León" de nuestra ciudad.

1 comentario:

Abo__ dijo...

Estimado José Manuel,

Antes de nada, y por si me olvido, agradecerte mucho este blog donde con tanto cariño y sabiduría nos cuentas los orígenes y la Historia Antigua de nuestra ciudad, ya como Historiador, ya como Arqueólogo o ya como un vigués que busca entusiasmado las cosas “perdidas” de nuestro pasado. Un saludo.

Solo un par de comentarios sin extenderme, pues sé de las limitaciones que tiene un blog, por lo tanto quisiera aprovechar esta oportunidad que nos brindas en poder realizarlos, y sin más, allá voy.

Dices:

“Habitualmente algunos autores identificaban a la ciudad de Vigo cómo el "Vicus Spacorum" de los textos clásicos, Antonio de la Peña, en un reciente artículo sobre las vías romanas de la provincia de Pontevedra, llega a la conclusión de que es errónea está ubicación y que tal villa habría que situarla en tierras coruñesas y más concretamente en Rois ya que el itinerario está equivocado y donde dice Vico Spacorum debería decir Vicos Caporum es decir el pueblo de los Caporos que estaría situado entre el río Sar y Caldas de Reis, estos datos se obtienen por medio del estudio minucioso que se realiza de la vía XXII "per loca marítima" a su paso por la provincia de Pontevedra, al hacer el cálculo de las distancias, basadas estas en el miliario aparecido en la ciudad de Pontevedra.”

Hoy algunos, aún, seguimos identificando a nuestra ciudad de Vigo con el “Vico (no Vicus) Spacorum” que se menciona, únicamente, en el Itinerario de Antonino y de tal forma en todos los códices existentes que trataron los latinistas en sus distintas ediciones.
La “inventió” de Bouza Brey y algún otro anterior, debido a la no interpretación de la vía romana en mi humilde opinión, les hicieron llegar a esa incierta conclusión de que “... donde dice Vico Spacorum debería decir Vicos Caporum...”. Digo incierta conclusión por dos poderosísimas razones: 1ª El Itinerario de Antonino menciona una ciudad de nombre Vico Spacorum de forma muy clara y en todos los códices sin ningún tipo de duda. (ya nada digo del topónimo que le acompaña, la cuestión arqueológica como bien nos relatas con continuos hallazgos -casi diarios últimamente-, distancias coincidentes...) y 2ª Que ese “juego” con la palabra del topónimo antoniniano para llegar, interesadamente, a los Copori de Plinio muy bien documentados estos en la epigrafía existente como “copori” y nunca como “caporo”, no les resultó suficiente ya que el error sería mayúsculo pues, y estarás conmigo, que de esos hipotéticos “caporos” es completamente imposible se pudiesen imaginar un “Vico-s Caporum” –después de la metátesis previa para hacerla “coincidir” de “paco” por “capo” y en el mejor de los casos daría un mejor: VICOS CAPORORUM, nunca un Vicos Caporum como en su día propusieron. Al final de un lastimoso juego de palabras concluyeron con un imposible Caporum cuando lo “lógico” hubiese correspondido a un Capororum como te dije.

De ese miliario de El Burgo indicando 96 millas a Luco es precisamente el complemento que fijan las dos vías (19 y 20) ya que los 96.000 pasos viene siendo la suma entre los 15.000 de la vía 20 entre Ad Duos Pontes (Pontevedra) y la Aquis Celenis y los 81.000 de la otra vía, que llaman 19, entre esta Aquis Celenis y la capital conventual Luco Augusti. Es decir: 15.000 + 81.000 = 96.000 pasos que son los que indica el famoso miliario de Adriano del Burgo. Es decir: se comprueba, por otro lado, que los romanos en este caso indicaron distancia de “Pontevedra” a Lugo” por el camino más próximo, el “compendium” entre ambas ciudades y para ello utilizaron tramos de ambas vías. Lo otro un juego nada afortunado en cifras, que hay que sumar o restar para su encaje, en fin...

Bueno, Hidalgo, un pequeño rollo que puedes mirar en:

- VILLANUEVA G. RAÚL. VIII Congreso Internacional de Caminería Hispánica, 2006. “Revisión de las vías 19 y 20 del Itinerario de Antonino correspondientes a la antigua Gallaecia”
- VILLANUEVA G. RAÚL. “EL NUEVO MILIARIO” 2006 nº 3, “Las Vías romanas 19 y 20 del Itinerario de Antonino”

Un saludo.